Esta semana con motivo de la reunión “Pascua con nuestros hermanos migrantes. “Encuentro de Obispos de frontera de Colombia y Costa Rica y Obispos de Panamá”, el Papa Francisco envió un mensaje muy claro a los obispos participantes.
“Hoy, la Iglesia que peregrina en Colombia, Costa Rica y Panamá, asociándose al Señor quiere responder: “En el Darién, con los hermanos y las hermanas migrantes”. Es ahí que ellos nos esperan, en la orilla terrestre de un mar de lágrimas y muerte que une hombres y mujeres, adultos y niños de las más diferentes latitudes”, le escribió el Papa.
Les continuó diciendo: “La migración en esa región incluye venezolanos, ecuatorianos, colombianos, haitianos, que a lo largo del camino se vinculan con grupos de nicaragüenses y otros caminantes centroamericanos, así como de otros continentes.
Con su faceta multicultural, esta caravana humana pasa por el Tapón del Darién, una selva que es triunfo de la naturaleza pero que hoy se convierte en un verdadero viacrucis que no sólo pone en evidencia los límites de la gobernanza migratoria en el hemisferio occidental, sino alimenta un próspero negocio que permite acumular ganancias ilícitas del tráfico humano.”
“El camino de la migración necesita pastores y agentes de pastoral que se atrevan a superar los límites de lo establecido, que no teman reconocer ninguna senda porque han perdido el miedo que paraliza, capaces de regresar a lo esencial, desinstalándose de la indiferencia, porque son conscientes de que, sólo caminando al ritmo de Dios con su pueblo santo, se podrán cruzar las barreras de lo convencional, llevando a la Iglesia, junto con los hermanos y hermanas migrantes, por vías de esperanza”, enfatizó en su misiva el Romano Pontífice.
Al final del mensaje los animó a vivir con alegría estos días de Pascua, junto a su característica de petición de orar por él.
Para acceder al mensaje completo puede hacerlo ingresando al enlace: https://t.co/RVdpqrS5jg?ssr=true